SINDICATOS Y CC.AA. PRESENTARÁN ALEGACIONES AL ESTATUTO MIR EN EL TRÁMITE DE AUDIENCIA
El sector aspira a mejorar una norma de mínimos que rechazan los médicos

 

El Ministerio de Sanidad y los sindicatos UGT, CC.OO., el sector de Enfermería de la coalición Cemsatse y CIG han firmado un acuerdo sobre el borrador del real decreto que regula la relación laboral especial de residencia, un texto que rechaza la CESM y los propios residentes, que anuncian una posible huelga si el Gobierno no rectifica su posición.

 

"Es un punto de partida para mejorar las condiciones del personal sanitario en formación". En estos términos se han referido la mayoría de los sindicatos, entre ellos CC.OO., UGT y Satse, al borrador del real decreto que regula la relación laboral especial de residencia aprobado en el ámbito de negociación por el Ministerio de Sanidad y las centrales sindicales con representación (FSP-UGT, CC.OO. , CIG y el sector de Enfermería de la coalición Cemsatse).

Todos valoran este primer paso, a excepción de los principales afectados por la norma: la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) y la Asociación Española de Médicos Internos Residentes (Aemir), que han rechazado frontalmente el acuerdo al entender que "no contribuirá a dignificar el trabajo de los más de 18.000 médicos que se forman como especialistas ahora mismo en España".

Ambas organizaciones, junto con el Consejo General de Colegios de Médicos, el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina y las sociedades científicas, decidirán las acciones que a partir de ahora van a emprender en una reunión que mantendrán el próximo 10 de marzo.

No obstante, los más de 4.500 médicos residentes de la Comunidad de Madrid ya han amenazado con ir a la huelga si el Gobierno no rectifica su posición, que, a su juicio, "es de arrogancia y desprecio a los médicos".

Todas las centrales sindicales (o casi todas) consideran un acuerdo de mínimos que intentarán mejorar, junto con las comunidades autónomas, a través de las alegaciones que presentarán en el trámite de audiencia, que ahora se abre y que durará alrededor de cuatro meses. Sanidad estima aprobar el real decreto en junio.

Retribuciones y jornada siguen siendo los puntos más críticos y susceptibles de mejora durante la tramitación de un texto que el subsecretario y la directora general de Recursos Humanos del Ministerio de Sanidad, Fernando Puig de la Bellacasa y Consuelo Sánchez Naranjo, celebraron a bombo y platillo calificándolo de "importantísimo" para el avance del SNS "porque por primera vez en España se regula la relación laboral de los cerca de 20.000 residentes".

El decreto establece una jornada ordinaria máxima de 37,5 horas semanales y se limitan a 7 las guardias mensuales. Los residentes tendrán derecho a un descanso continuo de 12 horas después de una jornada ordinaria o de 24 horas, salvo en casos excepcionales de especial interés formativo según criterio de su tutor o en casos de problemas organizativos insuperables. Además, la jornada máxima total, incluyendo guardias, no podrá ser superior a 58 horas semanales hasta el 31 de julio de 2007, 56 horas semanales hasta el 31 de julio de 2008 y 48 horas semanales desde el 1 de agosto de 2008, para así cumplir con el Estatuto Marco y la normativa comunitaria.

Los sindicatos consideran la regulación de la jornada "manifiestamente mejorable", al no incorporarse, según CC.OO., la demanda de descanso de 24 horas tras una jornada de trabajo de 24 horas.

En cuanto a las retribuciones, se mantienen tal y como se acordaron en la Comisión Nacional de Recursos Humanos. Así, se establece una subida media del 18 por ciento en el sueldo base graduada en tres años (25 por ciento, 25 por ciento y 50 por ciento) y se fijan complementos de grado de formación y atención continuada y pagas extras. Los conceptos se aplicarán con carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2006 cuando se apruebe la norma.

El texto no resuelve la petición de los sindicatos de invertir los porcentajes de gradualidad (50 por ciento en el primer año, 25 por ciento y 25 por ciento) en la equiparación del sueldo base con el personal del Grupo A y B.

Respecto a otros derechos, como el de huelga, que se ha cuestionado en los últimos días desde diferentes ámbitos, Puig de la Bellacasa y Sánchez Naranjo aseguran que el contrato del residente no se extinguirá por ejercer su derecho a huelga, pero se suspenderá los días que el trabajador la ejerza, tal y como establece el Estatuto de los Trabajadores y ocurre en cualquier otro ámbito laboral.

El decreto también recoge medidas para conciliar la vida familiar y laboral y asegurar la protección integral contra la violencia de género.

En cuanto a los aspectos formativos, Puig de la Bellacasa anunció la creación de un grupo de trabajo dentro de la Comisión Técnica de Formación Especializada para abordar lo relativo a la formación y elaborar una norma que complemente la regulación laboral. La tramitación de ambas normas finalmente no será paralela, como habían demandado los sindicatos médicos, no obstante, Sanidad espera tener aprobado todo lo concerniente a los residentes antes de que acabe 2006.